Fue creado por John DeWeese, Otavio Good y Maia Good, tres programadores que venían del sector de los videojuegos, en un periodo de desarrollo de dos años y medio. Su objetivo era desarrollar una aplicación que permitiera a los turistas obtener una traducción inmediata de carteles e indicadores sencillos, de forma rápida. La aplicación no está pensada para traducir textos largos o libros, aunque puede servir para traducir pasajes cortos.
Funciona procesando las imágenes recogidas por la cámara en tiempo casi real. Escanea fotograma a fotograma con un software OCR, reconociendo los textos escritos utilizando tipografías impresas (no texto escrito a mano o tipografías que lo simulen) y traduciéndolos al idioma seleccionado. Una vez traducido, localiza la palabra en la imagen que se muestra en ese instante al usuario, la borra y la sustituye por la versión traducida, logrando el efecto de “traducción en tiempo real”.
Fuentes: