La alta definición es un sistema de vídeo con una mayor resolución que la definición estándar, alcanzando resoluciones de 1280 × 720; y 1920 × 1080 píxeles (las más utilizadas). Es un proyecto que tiene más de 20 años de existencia, el cual se inició con la tecnología analogía. Pretendía: Llegaron a salir dos formatos de alta definición: D2 Mac y HD Mac, pero el grave problema que tenían estos formatos era que el ancho de banda que necesitaban para emitir la señal de televisión era mucho mayor que el que permitía la televisión analógica. En Europa se intentó a toda costa que fuera compatible con el PAL. La característica más importante es la mayor definición de imagen ofrecida por la alta definición comparada con los sistemas actuales. Si el sistema PAL utilizado en España ofrece una resolución de 768×576 píxeles, la alta definición puede utilizar dos resoluciones distintas: 1920×1080 y 1280×720 píxeles, siempre usando la proporción 16:9. La alta definición es la tecnología que ha proporcionado los mejores cambios al mundo del cine y la televisión; la captura de imágenes en esta resolución, combinadas con diferentes métodos de transmisión digital y codificación, nos brinda la posibilidad de obtener imágenes con una resolución de hasta cuatro veces mejor que la de un televisor estándar. En Estados Unidos cientos de cadenas ya emiten en alta definición, en Europa hace dos años que empezó la emisión, en España hace poco que los canales de emisión abierta de la TDT emiten en HD, después de un año de pruebas (excepto en la plataforma Digital +, en la que hace más de un año que Canal + emite en alta definición, a través de televisión por satélite).
Estas altas resoluciones se consiguen enviando la señal comprimida mediante algún códec como MPEG-2 o H.264. El sonido se transmite con formato Dolby Digital y ofrece el popular 5.1 para aprovechar los sistemas de altavoces del Home Theater. La alta definición hace que los soportes digitales que encierren contenido en alta definición sean nuevos y diferentes, comparados con los existentes hasta ahora. Por ello se libró una bata entre el soporte “Blue Ray”, apoyado por Sony o Philips, y el “HD-DVD”, apoyado por Thosiba y Microsoft. Finalmente la guerra la ganó el “Blue Ray”, puesto que fue apoyado por muchas marcas prestigiosas que siguieron a Sony en esta aventura comercial, la cual fue la triunfadora.