Consiste en que las personas tendrán la capacidad de comunicarse entre ellas sin la necesidad de aparatos, como los teléfonos móviles. Su instrumento será su propia mente. Las mentes funcionarán como una especie de correo electrónico. Cada persona utilizará su propia cabeza como su cuenta de correo y podrá enviar determinados mensajes solo con un poco de su concentración: imágenes, correos escritos, etc…
El proceso consistirá simplemente en que la persona elige el pensamiento que desea compartir con otras mentes y lo aísla en la suya para impedir que haya envíos erróneos. Se concentrará lo suficiente y lo enviará a la persona o personas deseadas. Esa persona recibirá el pensamiento-correo y tendrá posibilidad de reenviarlo si así los desea.
Con esta nueva forma de comunicación no se contaminará tanto y se reducirán los gastos, pues no se requieren teléfonos móviles y la gente podrá enviar y recibir mensajes instantáneamente